La
Religión y Las Ventas
Después de 12 años
trabajando en áreas comerciales, me queda claro que Dios es un gran componente
para el logro de los objetivos, entiendo que el comentario que puede resultar
divertido y hasta controvertido, pero cuando un equipo no está entrenado, el
factor religioso juega una dosis importante en el tema.
Es interesante ver cómo
vendedores que no aplicaron un sistema de trabajo ordenado y lógico desde la
primera semana de gestión, terminan culpando a su supervisor, a los sistemas de
aprobación, al mercado y hasta Dios del por qué no lograron la cuota
asignada. Y por el contrario piensan que
aquellos que lo lograron o sobre pasaron una meta tienen una bendición
especial.
Bueno es cierto, aquellos
vendedores lograron objetivos tienen un algo especial, tienen un sistema de
trabajo, ordenado y lógico, que desarrollan durante 4 semanas a un ritmo
constante.
Este sistema de trabajo
les permite trabajar de una manera constante durante el mes en la prospección
de clientes, seguimiento y maduración, donde obtendrán un resultado
satisfactorio o no. A diferencia de los
vendedores fervorosos que tenderán a iniciar muy lentamente sus actividades de
prospección de clientes a partir del día 6 ó 7 del mes, para luego apresurarse
con suerte el día 10. En otros casos los
más vendedores más fieles iniciaran el día 15 dejándole la voluntad del logro
de sus objetivos a Dios.
Este sistema de trabajo pierde
más de una semana de gestión en muchos casos, genera grandes picos de
adrenalina y desgaste emocional, con comentarios que enfocan y agrandan las
deficiencias y problemáticas con el fin de asignarle a alguien la culpa de su
desgracia.
Seamos realistas, como en
toda área, como en toda empresa, nada va a ser perfecto, siempre existirán las
caídas de sistemas, procesos que no se ejecuten a tiempo o al 100% ya sea por
personal nuevo o por falta de entrenamiento adecuado de las áreas
administrativas, temas que siempre van existir en menor o mayor gado, lo que
hace que sea indispensable que el vendedor empiece a gestionar en el peor de
los casos el día 2 ó 3.
Para lograr un equipo
entrenado es necesario definir acciones y logros semanales, tener correcciones
a tiempo donde la figura del supervisor es vital para cumplir los avances. Algo tan sencillo como hacer una capacitación
del producto y validar que éste haya sido entendido desde las condiciones hasta
el correcto llenado de una solicitud, debe hacerse de preferencia en la primera
semana del mes, sino sobre seguro tendremos una serie de quejas y problemas
para el cierre.
En resumen tener un equipo entrenado para e logro de objetivos depende del orden y disciplina que estemos dispuestos seguir dentro de los 30 días de gestión o 365 al año.
Bendiciones ¡¡¡